No mutiles tu poder...
Siempre hablo de que la vida con amor tiene un sentido real, que nuestro propósito en esta debería ser el sentirnos amados o entregar lo que sentimos, pues la felicidad llegará si el amor nos invade, ya sea un amor loco,de amistad, maternal, familiar, hacia una profesión, una meta … sin ello cualquier propósito para una vida feliz y plena no llegaría jamás.
Pero ALTO!! Debo decir que no he hablado suficientemente del DESEO.
Este es el que nos mueve para realizar hasta la tarea más insignificante de nuestro día a día. Y a veces no llegamos a percatarnos... pero nos mueve o nos detiene, nos hace correr, llorar, soñar, pensar, suspirar, respirar, creer, entristecer, vencer, traspasar…
El amor es un sentimiento básico que nos ayuda en nuestra felicidad, si no, no nos sentimos felices, o nos mantiene nuestra alegría para sentirnos felices.
Pero jamás podría existir este sin la compañía del deseo. Nace en nosotros a cada instante, en ocasiones, hablamos de él como un capricho, o quizás creemos que solo existe para objetos, o personas…Pero esto es lo que nos mueve… Desear la felicidad, es lo que nos lleva a conseguirla, a buscarla. Desear el amor es lo que nos lleva a encontrar a la persona amada, desear sentirnos valorados, útiles, es lo que crea en nosotros las ganas de trabajar para nosotros o para un tercero, desear enriquecer nuestra mente, es lo que nos lleva a estudiar, leer, contemplar.. Y así todo aquello que realizamos y nos rodea se forma a partir del deseo.
Pero cuando deformamos la palabra deseo, cuando corrompemos su significado y destrozamos toda su belleza como sentimiento y palabra?
Desear debe transportarnos a un lugar mágico, un lugar lleno de alegría, de sueños…
No podemos cambiar su significado, su propósito, su fin. Está en nosotros con la esperanza de movernos con energía positiva, es lo que nos sintoniza con los demas, con uno mismo, con la felicidad ,con la satisfacción, con la posibillidad d algo mejor...
DESEA, ASI MOVERAS TÚ MUNDO
